Thiago es un hermoso dálmata que convirtió un tradicional paseo familiar, en una gran misión de rescate que terminó por salvar a un perrito abandonado.
A principios de este mes, Rey Caquías y su perro, Thiago, salieron a caminar como lo hacen habitualmente por las calles de su comunidad en Puerto Rico. Sin embargo, este adorable dúo en medio de su caminata terminó convertido en un trío al incorporar a un nuevo amigo canino.
Dálmata encuentra un cachorro abandonado y decide quedárselo para siempre.
Todo comenzó cuando Caquías notó que su hermoso dálmata estaba distraído, algo al lado del camino llamó su atención.
El perrito estaba dispuesto saber de qué se trataba así que se negaba a la petición de su padre adoptivo de continuar con la caminata. Al respecto Caquías comentó:
“Tomó un desvío hacia el bosque. Empecé a llamarlo, pero me ignoró. Fue entonces cuando escuché un pequeño ladrido. Luego miré de cerca y vi un cachorrito muy asustado”.
Todo indicaba que el perrito había sido abandonado, tenía solo algunas semanas de nacido por lo que difícilmente hubiera sobrevivido sin recibir ayuda.
Por fortuna, su destino que parecía marcado, dio un giro total cuando Caquías y su perrito le brindaron la ayuda que necesitaba. Sin pensarlo demasiado, el joven decidió rescatar al indefenso cachorrito, quien estaba muy delgado y temblaba de miedo.
Aunque al principio el perrito no fue muy receptivo con su salvador, incluso intentó morderlo, el joven no se dio por vencido y buscó opciones para ayudarlo. Después de unos minutos logró encontrar una caja donde transportó al perrito y lo llevó hasta su casa.
Ya mucho más calmado, la pequeña bola de pelos parecía reconocer que estaba en buenas manos, así que no tuvo más opciones que rendirse ante los cuidados que le estaban ofreciendo.
Caquias bañó y alimentó al perrito, luego lo llevó al veterinario para que le realizaran un chequeo general.
Durante todo este proceso su incondicional amigo, Thiago, no se apartó del cachorrito, era como si supiera que su persona favorita llevaba en sus manos a un pequeño peludito que necesitaba ser protegido y él estaba ahí para actuar como ese hermano mayor y acompañarlo durante el proceso de recuperación.
Afortunadamente, el perrito rescatado no tenía graves lesiones, necesitaba subir de peso y combatir algunas pulgas pero era algo controlable. En pocos días, el peludito que una vez estuvo solo y completamente vulnerable, ahora luce mucho más fuerte y saludable.
Ha aprendido muchos comandos, y con ayuda del dálmata ha descubierto un mundo de posibilidades para hacer travesuras sin que su persona favorita se moleste.
“Me he encariñado mucho con él”, comentó Caquías.
Por supuesto, no es el único que parece derretirse ante esta pequeña bola de pelos, Thiago se ha convertido en su fiel protector y ángel guardián.
Han creado un vínculo muy fuerte y no hay lugar donde vaya uno sin que el otro lo siga, corren, juegan, comen y hasta duermen juntos.
“¡Ellos se llevan muy bien!” destacó Caquías.
Aunque se desconoce los detalles de cómo el cachorrito terminó solo en las calles, nos alegra saber que hoy día disfruta de una vida tranquila y está recibiendo amor bonito gracias a que un dálmata lo descubrió justo a tiempo.
“Estoy agradecido por él. Thiago es un perro muy amable. Nunca hubiera visto el cachorro si él no lo hubiera encontrado. Mi reacción fue de alegría y mucho orgullo».
Sin duda alguna que los perritos son esos ángeles de cuatro patitas dispuestos a transformar la vida no solo de quienes le abren la puerta de su hogar sino de sus semejantes.
No en vano se dice que en un mal momento, más que una mano amiga se necesita una patita incondicional. Ese fiel guardián que con su amor puede hacer que incluso los días malos sean mejores.