Si decimos perezoso es posible que nuestro pensamiento inmediato nos traslade a Sid, esa adorable criatura animada que con sus ocurrencias conquistó a grandes y pequeños.

Sin bien en un personaje de ficción de la película «La era del hielo», en la vida real existe un perezoso que logró calar en el corazón de miles de internautas al darse conocer su historia.

Estos animalitos no son los más afectuosos del mundo, de hecho, no les gusta el contacto y consideran un tierno abrazo como una amenaza.

Perezoso rescatado de un tendido eléctrico se convierte en el mejor amigo de un perrito.

Sin embargo, en ocasiones pueden desarrollar amistades poco probables tanto con los humanos como otros animales que normalmente evitarían. Un ejemplo de ello es Chuwie, un perezoso que vive en América del Sur, específicamente en Caracas-Venezuela.

Este adorable peludito fue rescatado hace tiempo gravemente herido, había recibido una gran descarga eléctrica mientras caminaba por uno de los postal de alta tensión de la capital del país.

Lamentablemente, sufrió severas lesiones que parecían difíciles de sanar. Sin embargo, estaba en buenas manos, fue atendido por una pareja que lo vio tirado a un costado de la carretera.

El perezoso parecía no darse por vencido y sus rescatistas tampoco lo harían. Al no contar con los recursos necesarios pidieron ayuda a veterinarios y expertos de toda América del Sur, Chuwie se había convertido en una prioridad y querían asegurarse que su nuevo amigo lo lograría.

Fueron momentos de mucha tensión, a pesar de tener todo en  contra, el perezoso logró sobrevivir. Perdió todas las garras de las patas traseras y la mano izquierda, pero estaba vivo, disfrutando de una oportunidad al lado de un maravilloso equipo que insistió en salvarlo.

En medio de esta agitada contienda por salvar y mejorar su calidad de vida, tuvo la suerte de conocer a alguien que terminó convertido en su mejor amigo.

Seven, un adorable perrito que desde el primer momento conectó casi que de manera mágica con el perezoso.

Este hermoso peludito pertenece a la familia que salvó a Chuwie. Si bien, sus cuidadores temían que el perezoso se sintiera amenazado por la presencia del perrito nada de esto sucedió.

Seven se fue acercando poco a poco hasta lograr que Chuwie se acostumbrara a su presencia, sorprendentemente, lo aceptó y desde entonces se han vuelto inseparables.

Estos hermosos peluditos tan diferentes se han convertido en los amigos más tiernos, cada uno va a su ritmo, pero eso no los limita a pasar tiempo divirtiéndose y siendo muy felices.

Seven lleno de astucia y habilidad trata de encontrar intereses comunes con su nuevo mejor amigo. Han construido un hermoso vínculo que se fortalece con el tiempo y no paran de conquistar corazones con su complicidad.

Los padres adoptivos de Seven comentaron al respecto:

“La persistencia de Seven valió la pena en gran medida. Chuwie ahora está más relajado y feliz con Seven a su lado”.

La historia de este valiente perezoso conmovió a tantos que se convirtió en el embajador de Chuwie Foundation, Rescue and Rehab Center for Sloths, un centro de rehabilitación fundado por Haydee y Juan Carlos Rodríguez para ayudar a perezosos vulnerables.

Con la deforestación en América Central y del Sur, el hábitat de esta especie se está reduciendo. Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, el perezoso enano está en peligro de extinción y el perezoso Bradypus esta vulnerable.

En Caracas, ciudad donde fue rescatado Chuwie tres peligros acechan a estos mamíferos: los perros que los atacan, los accidentes de tránsito, pero sobre todo, los tendidos eléctricos.

Los tendidos eléctricos hacen que la mayoría sufra daños irreversibles por las descargas, incluso teniendo el peor de los desenlaces.

Afortunadamente, el destino de Chuwie fue completamente diferente gracias a una pareja que le brindó la ayuda que tanto necesitaba.

Chuwie es el único perezoso que permanece indefinidamente en la casa de Haydee y Juan Carlos, aunque no podrá regresar a su hábitat natural pasa sus días disfrutando de la complicidad de su mejor amigo canino.