“Los maestros los encontraron apiñados unos junto a otros…”
El otro día, Suzette Hall, fundadora del centro de rescate de perros Logan’s Legacy 29 , recibió un mensaje desgarrador de un amigo que trabajaba en una escuela local. Dos cachorros blancos con un pelaje muy enmarañado se estaban refugiando en el recinto escolar y aparentemente no tenían adónde ir.
“Ella y algunos otros profesores los encontraron amontonados unos contra otros…”, dijo Hall a The Dodo. “Estaban muy asustados”.
A Hall se le encogió el corazón al ver las fotos del dúo y notó el amor y el miedo en sus ojos mientras miraban a los trabajadores de la escuela en busca de ayuda. El rescatista aceptó acogerlos, pero, lamentablemente, problemas con el automóvil retrasaron su llegada durante algunas horas.
Mientras esperaban a que llegara Hall, los funcionarios de la escuela se unieron para trasladar a los perros asustados a una zona más segura. Un conserje acorraló con cuidado a los cachorros en un baño desocupado y los profesores se turnaron para vigilarlos, intentando alimentarlos con restos de comida mientras tanto.
“[Una maestra] les había dado su almuerzo, pero había brócoli por todas partes”, escribió Hall en Facebook . “Aparentemente, no les gusta el brócoli”.
Cuando Hall finalmente llegó a la escuela más tarde ese día, se sorprendió por la apariencia física de los perros.
“La verdad es que no lo podía creer cuando los vi”, escribió Hall. “Tenían rastas y estaban tan sucios que parecían dos pequeños [desarrapados]”.
Los cachorros, que más tarde se llamaron Maggie y Mack, al principio tenían miedo de sus rescatadores. Llevó un tiempo capturarlos, pero Hall se negó a darse por vencida con los dulces hermanos. Finalmente, acorraló a los cachorros y los guió con éxito hasta su trampa para perros humanitaria.
Hall cargó a los cachorros en su camioneta y se dirigió directamente al Camino Pet Hospital, donde se les realizarían evaluaciones médicas completas y cortes de pelo muy necesarios. Después de un largo día de rescate, Maggie y Mack estaban felices de acomodarse en su jaula y descansar un poco de camino a la clínica veterinaria.
“Los dulces bebés estaban tan cansados que se quedaron dormidos en mi trampa”, escribió Hall. “Por fin pudieron dormir… sabían que estaban a salvo”.
El personal del Camino Pet Hospital recibió a Maggie y Mack con cálidos abrazos y elogios sin fin. Los perros aprobaron sus exámenes médicos con gran éxito antes de someterse a los cambios de imagen que estaban esperando desesperadamente.
El equipo trabajó con cuidado mientras afeitaban el pelaje de Maggie y Mack. No estaban seguros de cuánto tiempo había pasado desde la última vez que los hermanos se habían cortado el pelo, pero enseguida se dieron cuenta de lo aliviados que se sentían los cachorros al deshacerse de sus dolorosas marañas.
Maggie y Mack ahora están en hogares de acogida, todavía tratando de descomprimirse de su pasado traumático. Se sienten mejor cada día y Hall está dedicado a brindarles el “felices para siempre” que se merecen.
Ella espera encontrar pronto un hogar perfecto para el dúo. Hasta entonces, ella y su equipo seguirán brindando a Maggie y Mack el amor y el cuidado que necesitan después de todo lo que han pasado.
“Capa por capa, iremos dejando atrás el pasado”, escribió Hall. “Pero finalmente están a salvo”.
Para solicitar información sobre la adopción de Maggie y Mack, comuníquese con Suzette Hall en Facebook.
Para ayudar a cachorros como Maggie y Mack a obtener la ayuda que necesitan, puedes donar al legado de Logan aquí .
